viernes, diciembre 17, 2010

domingo, noviembre 14, 2010

sábado, octubre 09, 2010

lunes, agosto 23, 2010

sábado, julio 17, 2010

Arcano

"... tú eres un arcano..."

domingo, junio 20, 2010

El cuerno de la abundancia


Y dijo La Voz: "Tu cuerno de la abundancia apunta al norte. Ahí la tierra no sólo te será propicia y de buena suerte; además para ti será buena, te traerá abundancia y amor"

miércoles, junio 16, 2010

Cuatro Ciénegas



Algunas tradiciones ancestrales nos hablan de "lugares de poder", sitios cuyas misteriosas fuerzas telúricas afectan de una forma u otra a los seres humanos. La Wouivre con su poder de transformación. Si ello fuese cierto, sería la explicación lógica del efecto que el Valle de Cuatro Ciénegas, en Coahuila, ejerce sobre mí.

En días pasados tuve la oportunidad de estar nuevamente en el "Acuario del Desierto Mexicano", como denomina a este increíble lugar la revista National Geographic. En un futuro que espero sea próximo tengo la intención de dedicarle más tiempo a visitar y referir cada una de las maravillas de Cuatro Ciénegas, pero en tanto me gustaría compartirles un pequeño fragmento de un reportaje más amplio que hace tiempo le dedicó a este sitio el periódico Reforma:

"El Valle de Cuatro Ciénegas fue decretado Área de Protección de Flora y Fauna Silvestre en noviembre de 1994, y cubre una extensión de 84 mil 347 hectáreas.

Esta región estuvo cubierta hace millones de años por el Mar de Tetis. Actualmente, es una cuenca que se ubica a 740 metros de altura, rodeada de cimas de 3 mil metros.

Su paisaje pertenece principalmente al tipo de desierto llamado Chihuahuense que se caracteriza por la presencia de matorral desértico y pastizales.

Pero la peculiaridad de la zona radica en una serie de lagos, pozas y ríos formados por manantiales que se alimentan de un complejo sistema de canales subterráneos de agua altamente mineralizada que puede ser fría o caliente. Estas pozas de agua cristalina albergan la mayoría de especies endémicas (peces, caracoles y crustáceos) que se hallan en la región.

La poza más grande es la laguna de Churince con 600 metros de largo, pero la mayoría de ellas no alcanzan los 100 metros de diámetro ni rebasan los 8 metros de profundidad. Algunas como la Poza de la Becerra, tienen agua cálida (34ºC), pero en otras es fría como en el Río Los Mezquites y Las Playitas.

También raras son las dunas de arena blanca en las que se pueden observar los cambios que han sufrido plantas y animales para subsistir; tal es el caso de los insectos que se mimetizan con la blanca arena, y las yucas de metro y medio de altura que en realidad miden 10 metros pero están cubiertas por la arena"

(Periódico Reforma, sección I. Domingo 3 de diciembre de 2000)

sábado, abril 17, 2010

La enseñanza del ñu


Resultaba fascinante estar justo en ese momento, maravillado ante uno de los milagros más grandes de la naturaleza: el inicio de una nueva vida.

La hembra ñu se separó silenciosamente de la manada, la pequeña cría estaba por nacer. Poco a poco fue surgiendo, hasta caer a los pies de su madre. Con un gran esfuerzo y tras varios intentos fallidos logró ponerse de pie, con pasos titubeantes y ante una atenta mirada maternal. Bastaron tan sólo unos minutos para adquirir mayor seguridad, y ponerse después a correr y jugar con la felicidad de la vida brillando en sus ojos. El pequeño ñu celebraba ese momento como el gran inicio a la vida.

Este es un gran secreto – me susurró la voz del maestro invisible – en cuanto nacemos olvidamos que nuestra vida no inició en ese momento, y la clave se encuentra en recordar de dónde vinimos.

jueves, abril 08, 2010

La librería (sección 547)


¡Cuántos libros! Miles de volúmenes saturaban las mesas de lectura, los entrepaños de las paredes o simplemente se apilaban en el suelo de la antigua librería.

Estaba tan absorto tomando uno y otro para revisarlos, que no me percaté cuando un individuo de pelo cano se me acercó tendiéndome la mano en un cordial saludo. Nunca antes lo había visto, sin embargo algo en su mirada me resultaba sumamente familiar e inspiraba confianza.

– Los libros que buscas están en la sección 547 – me dijo mientras estrechaba con fuerza mi mano.

Sin decir palabra alguna y sin saber siquiera cómo era que él sabía lo que yo buscaba comencé a caminar por un largo pasillo en el que cada estante lucía pequeñas placas con números gravados. 2, 3... Apenas eran las primeras secciones, por lo que la 547 debería encontrarse mucho más adelante. Conforme andaba, el corredor se iba pareciendo más a un solitario túnel cuyo final no era posible vislumbrar. No sé decir con exactitud si al interior el lugar tenía menos iluminación, si la obscuridad se apoderó de pronto de toda la librería o, simplemente, al cruzar cierto umbral inicié una caída libre hacia la inconsciencia. Mi cabeza comenzó a dar vueltas y, justo antes de perder el sentido, alcancé a ver con el último rayo de luz a la persona que me había dado la indicación corriendo en un fallido intento por sostenerme.

Regresé de manera abrupta al mundo de las cosas diarias, trayendo conmigo el vértigo que apenas me permitía sentarme en la cama que no dejaba de vibrar como si también ella también fuera parte del movimiento giratorio que todo lo envolvía.

Fue la primera vez que algo, aunque fuera una sensación, atravesara conmigo de un mundo al otro. Ahora solo resta volver algún día para encontrar la sección 547 y consultar los libros que tienen la información que necesito o, en su defecto, localizarla en algún sitio paralelo.

viernes, marzo 26, 2010